En mi búsqueda por leer más libros sobre Medio Oriente, me topé con Las 40 reglas del Amor de Elif Shafak, la autora más leída en Turquía. Muchos dicen que este es su mejor libro. Y aunque no puedo afirmarlo porque sólo he leído dos libros de ella, entiendo por qué es un besteller internacional. El primer libro que leí de ella fue La bastarda de Istanbul, pero decidí escribir primero acerca de Las 40 reglas del Amor, ya que me gustó más éste que aquél.
Así pues, si quieren tener una reseña más completa del libro, acompáñenme a seguir leyendo. Y lean tranquilos que no hay spoilers.
Sobre ‘Las 40 reglas del Amor’
En este libro, Elif Shafak nos narra la historia de tres personajes en dos narrativas paralelas. La primera de ellas es sobre Ella, una infeliz ama de casa estrenada en sus 40 años que se embarca en un viaje al pasado cuando lee el manuscrito de una novela situada en el Siglo XIII, época en la que transcurre la segunda narrativa del libro. En este manuscrito, la autora nos introduce a Shams de Tabriz, sufista persa que viaja a Turquía para conocer a Rumi, un famoso intelectual y estudioso del Corán. Juntos, Shams y Rumi comienzan una relación espiritual que sería la responsable de convertir a Rumi en el poeta más famoso del mundo Islámico. Es a través de la intensa amistad entre Shams y Tabriz, que se despierta en Ella su lado espiritual y tomando como estandarte las enseñanzas sobre el amor de Shams, Ella toma decisiones que cambiarán el rumbo de su vida.
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La entrega del libro es sin duda creativa. Para el presente, que se narra a través de Ella, la autora utiliza una voz y una visión – la voz de Ella. Pero para narrar el pasado, es decir, la historia que transcurre en el Siglo XIII, se vale de distintas voces, incluidas las de Rumi y Tabriz. Es una narrativa interesante que le deja ver al lector distintas perspectivas de un mismo hecho, poniendo de relieve que toda historia siempre tiene dos versiones (una más cerca de la realidad que la otra), y que para entenderlas, hay que comprender los ojos con los que se miran.
¿Qué aprendí con este libro?
En primer lugar, me llevo un conocimiento nuevo sobre el Islam: el Sufismo. Antes de leerlo, no tenía idea de que existiera esta filosofía en el Islam. Muchos la llaman “misticismo islámico”, debido a que su práctica requiere estar en contacto con la parte más íntima y espiritual de nuestro ser. Para algunos Occidentales esta interpretación debe llegar como una sorpresa, pues generalmente estamos expuestos a las interpretaciones fanáticas y violentas del Islam – interpretaciones antagónicas en esencia al Sufismo.
La forma de describir el Sufismo y su práctica es algo que me gustó mucho del libro. Siendo una filosofía tan compleja, la autora logra explicar su esencia de una manera accesible y atractiva para cualquier público, usando un lenguaje coloquial y una narrativa fácil de seguir.
Por otro lado, aprendí también sobre la tradición poética de Medio Oriente. La poesía ha sido para esta región una gran herramienta de comunicación y de inspiración, y para muchos, Rumi es su mejor exponente. Por eso es, al día de hoy, uno de los poetas más leídos en Medio Oriente y el mundo (otro poeta que les recomiendo es Khalil Gibrán, de Líbano). Aunque gran parte del libro está basado en las enseñanzas de Rumi, la autora sólo transcribe algunas líneas de sus poemas. Por eso les dejo este link con cinco poemas de Rumi en español.
Así pues, recomiendo este libro a cualquiera que esté interesado en descubrir el Sufismo y en conocer un poco de la vida de dos personajes altamente influyentes en la cultura del Medio Oriente.
Y para despedirme, les dejo este extracto de Las 40 reglas del amor que me parece resume en esencia la práctica sufista:
“¿Por qué preocuparse tanto de las consecuencias de un futuro imaginario, cuando este preciso momento es el único tiempo en el que completa y verdaderamente podemos experimentar la presencia y ausencia de Dios? Motivados ni por el miedo a ser castigados en el infierno ni el deseo de ser recompensados en el cielo, los Sufís aman a Dios simplemente por ser Él, puro y sencillo […]. El amor es la razón. El amor es la meta.” (Esta traducción es mía).
Gracias por leer mi primera reseña de libros y déjenme su opinión en los comentarios o en mis redes sociales. ¿Les gustó? ¿Qué otros libros quisieran que añadiera a mi lista de Medio Oriente? ¡Espero leerlos!
¡Hasta la próxima!
Gaby
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